® Carlos Alguacil para Rittagraf
Imprimir sobre tejido: ¿Serigrafía o Sellos?
Tanto la serigrafía como el uso de sellos personalizados son opciones ideales para imprimir sobre tejido o cualquier tipo de prenda. Mientras que la serigrafía es perfecta para tirajes largos debido a su economía, velocidad y durabilidad, los sellos ofrecen una solución práctica y versátil. Con un sello podemos aplicar la tina fácilmente y estampar al instante sin necesidad de grandes infraestructuras ni conocimientos técnicos.
Imprimir sellos en tejido tiene numerosas aplicaciones. Por ejemplo, muchos de nuestros clientes utilizan sellos para marcar su logo o incluso para marcar la parte trasera de camisetas con la talla o las características. Los sellos son altamente manejables, lo que los hace ideales para zonas con pliegues o costuras, evitando los posibles problemas de exceso de tinta que pueden ocurrir con la serigrafía.
Pero no nos limitemos al formato pequeño o a los detalles secundarios al hablar de sellos. Si buscamos inspiración, solo tenemos que observar a los maestros estampadores de la India, quienes han llevado el arte de los sellos a dimensiones asombrosas, imprimiendo grandes bloques de madera tallados a mano.
Versatilidad del uso de sellos para imprimir sobre textil
Los sellos son una opción ideal para crear patrones en grandes extensiones de tela, ya sea a través de la repetición o utilizando sistemas modulares. Su enfoque fresco e intuitivo ofrece una alternativa a la serigrafía, donde la estructura del patrón está predefinida. Aquí, no buscamos la perfección y rigidez de la serigrafía, sino la irregularidad y la libertad creativa que los sellos proporcionan. El desafío radica en encontrar las tintas que ofrezcan el máximo grado de definición y detalle posible, sabiendo que los sellos son simplemente sellos y que los milagros, amigos míos, solo ocurren en Lourdes.
En general, las almohadillas de tinta textil para sellos disponibles en el mercado, como las de la serie Versacraft (Tsukineko), cumplen satisfactoriamente esta función, especialmente cuando se aplican sobre tejidos lisos y de colores claros. Sin embargo, su capacidad para cubrir superficies oscuras es limitada. Aunque esta característica puede resultar interesante si buscamos una estampación sutil con tonos coordinados, puede convertirse en un problema cuando necesitamos mayor opacidad.
Otro inconveniente de las almohadillas y tampones de sellos es su tamaño. Cuando trabajamos con sellos grandes, el proceso de entintado con almohadillas se vuelve más lento.
Es cierto que existen tintas textiles que se pueden aplicar con rodillos de caucho, como la serie Fabric Block Printing Ink creada por Speedball Art. Sin embargo, en este post nos centraremos en el uso de tintas de serigrafía textil, tanto tintas lacas textiles, como tintas acraminas textiles para imprimir sellos.
Estampar un sello textil con tinta de serigrafía paso a paso
Paso 1: Escoger el rodillo y la tinta textil:
Para aplicar la tinta de serigrafía sobre los sellos, vamos a necesitar el uso de un rodillo de grabado. Podemos usar un rodillo de caucho o de goma como los que utilizaríamos para entintar planchas de linóleo, xilografía, offset o litografía.
La fluidez de las tintas textiles de serigrafía varía según la serie. Las lacas son tintas más y tendrán una mayor adherencia al rodillo, mientras que las acraminas son tintas más fluidas y resultarán un poco resbaladizas. Por ello, recomendamos usar un rodillo de espuma densa. Este tipo de rodillo esponjoso reporta muy bien la tinta textil y evita que la tinta de serigrafía patine sobre el tintero. Es importante considerar que los colores dentro de cada serie pueden tener diferencias en densidad y fluidez, lo que afectará la opacidad y el rendimiento de la tinta al ser aplicada con el rodillo.
Ninguna de las otras tintas al agua probadas hasta ahora puede competir con la opacidad de las lacas y la intensidad de las acraminas. Este tipo de tintas textiles son ecológicas, muy asequibles y resistentes a los lavados.
Paso 2: Estirar y hacer un campo de tinta
Con la ayuda de una espátula, estiramos la tinta de serigrafía sobre una superficie no porosa: mármol, cristal o plástico, generando una o varias tiras homogéneas. Luego, con el rodillo de espuma o caucho, estiramos la tinta girando el rodillo en varias direcciones hasta conseguir una película fina y uniforme. Es importante que no haya un exceso de tinta en el rodillo o las capas aplicadas no serán homogéneas. El plástico en esta caso, hace la función de tintero; es fácil de limpiar y cómodo de transportar y guardar.
Paso 3: Aplicar la tinta sobre el sello
Aplicaremos la tinta sobre el sello haciendo varias pasadas y en diferentes direcciones, evitando dejar gruesos o líneas del rodillo. No es necesario aplicar presión. El sello debe tener una capa de tinta fresca para poder reportar bien la imagen.
La tinta de serigrafía a base de agua se seca bastante rápido, por lo que es importante no demorarse en el proceso de entintado. El secado de la tinta, puede crear gruesos y texturas innecesarias que se reportarán en la impresión.
Como decíamos al principio, cada color y cada tipo de tinta, tiene una fluidez y consistencia distinta. En caso de que la tinta se secara demasiado rápido, debemos limpiar el campo de tinta y el rodillo, reemplazando y aplicando tinta fresca. Si fuera necesario, podemos rebajar la tinta con un poco de agua (preferiblemente destilada) o incluso usar un retardante de tinta textil. Sin embargo, no conviene que la tinta sea demasiado fluida, ya que podría patinar en exceso y perder sus propiedades pictóricas. Tanto para limpiar el rodillo como el campo de tinta, un trapo con agua o una esponja húmeda serán suficientes para retirar la mayor parte de estas impurezas. El jabón limpiador de tinta de serigrafía al agua es fantástico para limpiar este tipo de tinta sobre nuestros sellos grandes y sellos super grandes personalizados.
Paso 4: Estampar el sello sobre el tejido
Si vamos a realizar la impresión de varios sellos, podemos utilizar un espray de cola textil (como el Takter 1000) para fijar el tejido a un tablero, mesa o superficie plana. De esta manera, evitaremos arrugas y posibilitaremos el registro de varios colores si fuera necesario.
Una vez entintado el sello, lo colocamos sobre la tela y ejercemos presión con una o ambas manos, asegurando que la presión se haya repartido de forma equitativa. Para conseguir una buena impresión del sello sobre textil y conseguir imágenes definidas, hay que conseguir una buena bajada de tinta. Si el sello tiene las características adecadas, esto se consigue con una perfecta armonización entre el tipo de tejido, la aplicación de la tinta y la presión adecuada. Con un poco de práctica entenderemos enseguida la cantidad de tinta y presión que debemos aplicar al sello.
Paso 5: Curar y fijar de la tinta ecológica sobre el tejido
Una vez terminado de estampar el tejido, deberemos dejar secar al aire. Una laca puede tardar entre 10 y 20 minutos en secar, depende de la condiciones ambientales y de la cantidad de tinta aplicada. Uan acramina, un poco menos tiempo.
Una vez seca al tacto, es recomendable planchar la prenda para acabar de fijar la tinta. Si no disponemos de plancha térmica para sublimación o serigrafía, podemos utilizar una plancha doméstica. El resultado será igual de duradero que si lo hubiéramos hecho con serigrafía, aunque la cantidad de tinta será menor y el grosor menos homogéneo.
Paso 6: Limpiar del sello
Recomendamos limpiar bien el rodillo y las herramientas con agua caliente y jabón una vez terminada la estampación. Como decíamos antes, el jabón de limpieza de tintas de serigrafía y un cepillo de cerdas, pueden ser de gran ayuda.
Ventajas de usar tintas de serigrafía textiles
A menudo, nos preguntan sobre la conveniencia de estampar sellos con tinta textil de serigrafía. A pesar de que estas tintas no parecen ideales debido a su composición acrílica, hemos encontrado que ofrecen innumerables ventajas al usarlas con sellos en nuestros proyectos de impresión.
El secado rápido es, sin duda, su inconveniente más destacable. Cuando la tinta se seca, crea una capa plástica sobre la superficie y obstruye los surcos del sello. Si estos son muy finos, es posible que se empaste la imagen y se pierdan detalles o líneas finas, requiriendo una limpieza constante.
Aquí destacamos algunas de las ventajas clave sobre del uso de tintas textiles de serigrafía para estampar sellos de caucho:
- Amplia gama de color.
- Miscibles entre ellas. Se mezclan con facilidad para conseguir nuevos colores.
- Tintas ecológicas.
- Opción de tintas opacas (lacas) y tintas transparentes (acraminas).
- Gran resistencia a los lavados.
- Las herramientas y los rodillos se limpian fácilmente con agua.
- Gran versatilidad: podrás aprovechar estas tintas para aplicar sobre textil con otros procesos como serigrafía, estarcido, plantillas e incluso pintar a pincel.
Recuerda que este tutorial es una guía básica, y la experimentación es clave para encontrar la técnica y los materiales que mejor se adapten a tus necesidades y preferencias. ¡Diviértete explorando la impresión sobre tejido y descubre tus propios recursos para tu trabajo!
Recomendaciones para el uso de tintas textiles de serigrafía con sellos
- Usa lacas si quieres conseguir un acabado cubriente.
- Usa acraminas si quieres obtener un resultado suave al tacto, donde la impresión sea casi imperceptible.
- Un exceso de tinta puede emborronar la impresión. Es mejor aplicar varias capas de tinta, que una capa gruesa.
- Un sello de caucho blando estampará con mejor facilidad que un sello creado con un material duro. Por eso, nuestros sellos para textil están creados con materiales blandos y fáciles de imprimir. Incluso los sellos grandes o sellos super grandes, imprimen con gran facilidad,
- Un exceso de tinta o un exceso de impresión emborrona el resultado. Si los huecos del sello se ensucian de tinta, deberás limpiar el sello.
- No todos los tejidos recogen la tinta de la misma manera. Hay tejidos más fáciles y atractivos.
- Es importante hacer pruebas de estampado antes de realizar una edición final. Prueba aplicar más o menos presión y más o menos tinta.
- Una vez acabes la impresión, recoge la tinta que puedas aprovechar. Si se encuentra en buenas condiciones, podrás reutilizarla. Así que guárdala en el mismo envase o en un bote nuevo que puedas tapar, si has realizado mezclas de color.
- Recuerda usar indumentaria que puedas manchar. Recuerda que las tintas de serigrafía que usamos son permanentes sobre superfficies textiles.
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